Alto El Loa
Empápate de la cultura atacameña en Chiu Chiu y conoce su iglesia, una de las primeras que se construyó en Chile. Visita el observatorio de Paniri Caur, que integra la observación moderna con la cosmovisión andina.
Conoce la zona típica de Ayquina, donde cada año se celebra la fiesta de la Virgen de Guadalupe. Y en Caspana, déjate sorprender por el verde de las terrazas que contrastan con las casas de piedra rosada, barro y techos de paja. No dejes de visitar la iglesia del siglo XVII y el Museo Etnográfico.
En Lasana los campos de flores se mezclan con las rocas del desierto y la cocina regional se funde con la artesanía. Podrás degustar llamo, patasca y conejo, además de algunos dulces tradicionales. El té y la mermelada de zanahoria son productos típicos que vale la pena probar.
Prob. de precipitaciones: 2%Humedad: 35% Viento: a 10 km/h.
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Explora los encantos Alto El Loa
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Chiu Chiu
Parada obligada de turistas que siguen el “camino del Inca”, es un oasis de sombra en medio del desierto. Habitado por comunidades atacameñas, su ritmo pausado es solo interrumpido por fiestas religiosas que, dependiendo del patrono, incluyen challa, harina o chicha de algarrobo.
Prueba las típicas preparaciones culinarias del norte del país y no dejes de visitar la antiquísima Iglesia de San Francisco, construcción que data de 1.600. Es la más antigua en Chile y fue levantada con milenarias técnicas indígenas. Entra y maravíllate: está hecha de adobe y madera de cactus. -
Ollagüe
Al límite de la frontera, el poblado tiene como telón de fondo montañas que se levantan por sobre los 5 mil metros de altura: los volcanes Ollagüe y Aucalquincha. Más al sur, los salares Carcote y Ascotan pondrán a prueba tus sentidos con temperaturas que oscilan entre los -23º C a los 25ºC.
¿Te gustan los carnavales? El destino altiplánico te espera con celebraciones que mezclan ritos religiosos y paganos. Disfruta de sus coloridos bailes y pegajosa música instrumental en la fiesta de Nuestra Señora del Rosario de Andacollo en diciembre, y la Fiesta de San Antonio en junio.
Parada obligada de turistas que siguen el “camino del Inca”, es un oasis de sombra en medio del desierto. Habitado por comunidades atacameñas, su ritmo pausado es solo interrumpido por fiestas religiosas que, dependiendo del patrono, incluyen challa, harina o chicha de algarrobo.
Prueba las típicas preparaciones culinarias del norte del país y no dejes de visitar la antiquísima Iglesia de San Francisco, construcción que data de 1.600. Es la más antigua en Chile y fue levantada con milenarias técnicas indígenas. Entra y maravíllate: está hecha de adobe y madera de cactus.
Al límite de la frontera, el poblado tiene como telón de fondo montañas que se levantan por sobre los 5 mil metros de altura: los volcanes Ollagüe y Aucalquincha. Más al sur, los salares Carcote y Ascotan pondrán a prueba tus sentidos con temperaturas que oscilan entre los -23º C a los 25ºC.
¿Te gustan los carnavales? El destino altiplánico te espera con celebraciones que mezclan ritos religiosos y paganos. Disfruta de sus coloridos bailes y pegajosa música instrumental en la fiesta de Nuestra Señora del Rosario de Andacollo en diciembre, y la Fiesta de San Antonio en junio.